3. Mentiras...

Lo que está escrito en esta entrada del blog es algo que escribí las noches del 22/03/2016 a las 2:24 y del 27/03/2016 a las 23:30.

Eran dos de esas noches en la que ves todo negro y la única estrella que desprendía luz en tu vida, se estaba apagando poco a poco.

Así que eran noches de recuerdos, recuerdos dolorosos, heridas “cicatrizadas” pero que cuando te caes… vuelven a sangrar, y pensamientos que aunque no quieras tarde o temprano siempre regresan a hacerte una visita… Os dejo con lo que escribí aquellas dos largas noches:

• Primera noche:

Una mentira woooooowwww... algo tan cotidiano como una MENTIRA, algo que siempre está presente en nuestras vidas… ¿O no? No vamos a engañarnos, cualquier persona de este mundo miente, con más o menos frecuencia y con mayor o menor maldad pero todo el mundo miente.

¿Frecuencia? Alguien puede mentir 1000000 veces y no hacer daño realmente, eso no importa.
Como dice la canción de Maná con Shakira: "Hay mentiras compasivas, hay mentiras por piedad, que NO quieren lastimar... Hay mentiras que nos HIEREN de verdad ay ay ay"

¿Daño? ¿DAÑO? Las mentiras que realmente importan son esas que nos acaban destrozando, haciéndonos sentir que no valemos nada, que todo el esfuerzo hecho por alguien se esfuma en un segundo, que somos estúpidos, que nos acaban cambiando en unos u otros aspectos. Esas mentiras son las que de verdad duelen.

Y pasan los días, las semanas, los meses, los AÑOS y te sigues preguntado a ti mismo "¿Por qué lo hizo?"

¿POR QUÉ?
Si yo solo intenté darle lo mejor de mí... Y no solo lo mejor incluso mucho más allá, le di hasta cosas que ni yo mismo sabía que podía ofrecer a alguien.

Seguirá pasando el tiempo y jamás sabré POR QUÉ lo hizo, POR QUÉ no me dijo la verdad, una simple verdad y no hubiera pasado absolutamente NADA joder.

Después de tanto tiempo lo pienso y lo pienso y lo pienso y os juro que no encuentro una respuesta, que no tenía por qué haber acabado así, que podíamos haber sido... ¿? Quien sabe lo que podíamos haber sido... porque se supone que cuando estás dispuesto a dar tu vida por alguien se puede llegar lejos, ¿no?. Pero bueno eso nunca sucedió, no sucede y nunca sucederá porque mintió.

Este es el punto es el que sale el rencor, la rabia, la impotencia pero ¿para qué?. Si ya todo da igual... Desde hace tanto tanto tanto tiempo...

Lo más duro de todo no es que te mientan, no es haberlo dado todo por una persona, no es que te traicionen, no es que cambies por esos hechos, no es que ese dolor siempre vaya a estar contigo pase el tiempo que pase, no es que trates diferente al resto de personas desde entonces... ¿Sabéis que es lo más duro de todo? Que la persona que para ti era toda tu vida, aquella en la que confiaste, aquella que quisiste por encima de todo y todos, aquella por la que estarías dispuesto a hacer CUALQUIER locura... Fuera la que lo hiciera. 

¿Sabes una cosa?...

Y sin embargo... 

• Segunda noche:

Algunas mentiras conllevan al dolor, wowww el dolor pero no ese dolor físico que sientes cuando te golpeas o te caes, es otro mucho más intenso porque no puedes hacer nada para curarlo excepto esperar y esperar y esperar... Ese dolor que no puedes sacar de ti por mucho que quieras y que al principio todas las noches te acompaña, y poco a poco, tan solo aparece una vez al mes o incluso ninguna quien sabe pero que siempre permanece latente dentro de nosotros y espera hasta aparecer de nuevo, como si fuera una enfermedad invisible.

Si, el dolor permanece nos guste o no y eso hace que cambiemos nuestra forma de ser en algunos aspectos que hacen que actuemos de forma diferente a como siempre lo hemos estado haciendo hasta ese momento.

Y cambiamos básicamente por miedo, temor, evasión… a que otras personas que nos importen nos hagan lo mismo. Va pasando el tiempo y vas viendo como gente que te importa no hace NADA para quedarse después de que tu hayas hecho MUCHO, por eso cuando ves que alguien importante puede salir de tu vida no le pones una pistola en la cabeza para que se quede porque piensas que todo el mundo es igual al fin y al cabo.

Cierto es, que cuando piensas que alguien se quiere ir y se lo pones en bandeja, puede que te sorprendan y te hagan ver que no, que no quieren irse y que quieren permanecer contigo, pero claro han sido tantas las personas que no han hecho eso, que hasta te sorprendes de que haya gente especial, entonces por eso ya actúas pensando en que se van a volver a ir dando igual todo lo demás.

• ¿Sabéis?...

Aun así intento ser el mismo de siempre a pesar de todas las cosas que me hayan podido pasar y a pesar de que alguna vez me gane la partida el temor a que me vuelva a pasar lo mismo. Y esto que acabo de decir es una MENTIRA como una catedral. ¿Y sabéis por qué? Pues porque aunque algunas veces me advierto a mí mismo sobre algunas personas, por más cosas que me hayan pasado y por más que intenten tirarme al suelo cada día me doy cuenta de que soy como soy y no van a conseguir cambiarme de ninguna manera. Por más veces que me fallen si creo que alguien vale la pena, ¿por qué no intentarlo?... así me va después... pero soy ASÍ y es lo que hay. Yo soy de los que dice que hay que ser fieles a nosotros mismos.
Y algún día llegará la persona que valga la pena de verdad y yo habré confiado en ella desde el primer momento.

Así que... ¡¡¡ Estés donde estés aparece YA !!!



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